¡¡¡FELIZ DÍA MÚSICOS!!!!
Tengo a tres grupos de personas por quienes siento predilección en el mundo: los cocineros, los escritores y los músicos. Yo tengo una fuerte vocación musical que cada vez que puedo la desato. Estoy segura de que, de haber seguido por donde iba en mi infancia, hubiera sido feliz siendo violonchelista. Por fortuna la vida me premió con un esposo músico (quien también se aplica en la cocina y en las letras), así que, de alguna manera, a través de él, yo disfruto de este arte.
Aquí celebro este día con dos de los que, en mi opinión, pertenecen al grupo de los mejores músicos de la humanidad: Wolfgang Mozart y Juan Luis Guerra, quien se inspiró en la Lacrimosa (parte del requiem que nunca terminó) del austríaco para componer esta maravilla que ahora escuchan.