Comer cuy...

Una vez fuí, en viaje solitario para "encontrarme conmigo misma" a Perú, visité Machu Pichu, Cuzco y Lima.En Cuzco, la dueña de la posada donde me alojé (quien me cuidó mientras yo soportaba las inclemencias del "soroche" o mal de las altura a punta de caldo de gallina y "mate de coca") me dijo que si yo era cocinera tenía que comer cuy.

El cuy es un roedor, un alimento ritual para los incas, que los peruanos degustan con pasión, sin detenerse en consideraciones sensibleras sobre "lo lindos que son"Yo rehuí la oferta con indirectas, hasta que el útimo día de mi visita, la doña, que me había cuidado como a un bebé, prácticamente me obligó a comprar un cuy al horno con papas.Yo me llevé tal manjar recién horneado a Lima, lo dejé en la habitación del hotel mientras pseaba por aquella ciudad llena de flores y libre de rejas, y cuando regresé, tuve que vérmelas frente a frente con mi destino.

No fué gran cosa, tiene un sabor nostálgico, sutil, casi imperceptible... Pero su aspecto es demoledor, he aqui la prueba.

P.D: Las foto me las tomé yo misma, si no había una prueba física de tal valentía, nadie me iba a creer. Las posteo abajo, pues aún soy novata y no se como ponerlas aqui

Foto: http://www.mundoalterno.com/blog/img/cuy_foto.gif



Sean bienvenidos este espacio que trata sobre el placer. El de cocinar, el de comer y el de vivir.