SIG 2008, estrógeno y testosterona


Que el sexo, la sexualidad, los géneros y la picardía están asociados a la comida es evidente. Este año el Salón Internacional de Gastronomía se mueve en esas aguas profundas y multicolores de la sensualidad, las diferencias entre las cocinas femeninas y masculinas y los posibles usos eróticos de los alimentos. Este año el SIG se llena de erotismo y voluptuosidad con ponencias de cocineros, enólogos y expertos en las materias gastronómicas que despertarán los sentidos al más indiferente.

Yo tengo la dicha absoluta, de participar (el Domingo 2 de Noviembre a las 3 pm) en una performance bautizada con el lúdico nombre de "Cocina de uno para el placer de dos". Mauricio García, quien se divierte en Margarita cocinando con los deliciosos productos que allá consigue, se trae un cargamento de ostras y erizos para el deleite de los asistentes. Yo voy a leer dos de mis cuentos (los más ardorosos) y para mi mayor felicidad, mi esposo Reinaldo Angulo cantará acompañado de su cuatro, las mejores canciones gastronómicas venezolanas.

El SIG va a ser una fiesta, la fiesta del gusto y de la sensualidad.

El programa lo podrán ver en el blog de La Guayaba Verde

Antropofagia, el gran tabú

El canibalismo es, junto al incesto, uno de los tabúes más arraigado en la psiquis humana. Comer carne de un semejante y traspasar sexualmente los vínculos consanguíneos son actos severamente castigados (legal y moralmente) por prácticamente todas las culturas. Existen excepciones: los Yanomami ingieren las cenizas de sus muertos en un ritual funerario llamado Reaju y en el Egipto faraónico la preservación del linaje real se aseguraba mediante el matrimonio entre hermanos.

Pero hoy, eventualmente algo pasa, alguien atraviesa el umbral, alguien desafía a natura. Un desquiciado encierra a su hija, la embaraza varias veces y la tortura; un hombre dado en adopción en su niñez conoce a su hermana biológica, se enamoran y tienen hijos ... Y un día, un chef inglés mata a su amante, lo descuartiza, lo fríe en aceite de oliva y se lo come.

Anthony Morley fue Mister Gay en 1993, luego se dededicó a la cocina y en abril de este año mató a su amante a puñaladas, extrajo músculo del muslo del cadáver, lo cocinó y lo ingirió... Mis comentarios sobrarían, los links los llevarán a la noticia.

Tenedor de oro para Tomás

A mí me encanta los reconocimientos, sobre todo cuando he sido testigo del talento y la dedicación que se están reconociendo. Por eso me siento encantada por saber que Tomás fué reconocido este año con el Tenedor de Oro que otorga la Academia Venezolana de Gastronomía.

Lo más maravilloso, lo que me enorgullece más, lo que hace que sienta que Tomás es uno de los talentos más exquisitos de la gastronomía, es que sé que, con premio o sin él, en Le Gourmet o en un tarantín playero, con filipina o en shorts, Tomás seguirá cocinando, inalterable y por el disfrute de hacerlo, su cocina maravillosa, poética y divertida.

¿Qué hace esta chica?